MAYO: Mes de las cerezas.

En primavera la fruta se altera!

Ya llega el verano y con él la temporada de una de las frutas más frescas y jugosas que tanto gusta, las cerezas!

Las cerezas son consideradas frutas dulces, carnosas y refrescantes, al igual que la sandía o el melón, que las hacen ser una opción estupenda para tomar como postre, picar entre horas, o incluirlas en la merienda o desayuno.

Las cerezas son frutos muy carnosos y apreciados por su sabor dulce y refrescante, ya que es una fruta de temporada del verano, igual que el melón, el melocotón o la sandía. Hoy, vamos a conocer el valor nutricional, beneficios y propiedades nutricionales de las cerezas.

Valor nutricional de las cerezas

Las cerezas es una fruta cuyo macronutriente más destacado son los hidratos de carbono, sobre todo fructosa, por lo que hace que sea una fruta dulce y de aporte calórico medio.

Más del 80% de la cereza es agua, lo que favorece la hidratación de nuestro cuerpo, algo muy importante durante los meses de más calor. Además, es pobre en grasas y proteína vegetal y presenta un porcentaje de fibra necesario para fomentar un tránsito intestinal regulado

Las cerezas nos aportan principalmente vitaminas C, B9 o ácido fólico, vitamina A y vitaminas B1 y B6. En cuanto a minerales, esta fruta contiene potasio , fósforo, calcio y magnesio

Por todas estas características nutricionales y muchas más, las cerezas tienen varios beneficios para la salud, entre ellos:

  • Permite regular la hipertensión por su contenido en potasio.
  • Poderoso antioxidante gracias a las antocianinas (sobre todo de la piel de la cereza) y ácido elágico.
  • Participa en la prevención de enfermedades crónicas y degenerativas (osteoporosis o enfermedades cardiovasculares, entre otras).
  • Excelente medicina para los casos de gota o ácido úrico alto.
  • Funcionamiento óptimo de nuestro sistema nervioso y muscular gracias a su contenido en potasio y magnesio.

¿COMO PUEDO INCLUIRLAS EN MI ALIMENTACIÓN?

La mejor manera de consumir las cerezas es un bol lavadas y al natural. No obstante, estas frutas pueden incluirse en numerosas recetas como ensaladas, macedonias, zumos, en halados caseros, granizados, batidos de desayuno o como golosinas congeladas y sin hueso.

Come fruta y si es de temporada mejor!